La humanidad ha migrado desde sus orígenes: por obligación, por necesidad, por decisión o simplemente por deseo. Así hemos poblado el mundo y seguiremos haciéndolo, porque migrar forma parte de nuestra naturaleza: del desarrollo, la evolución y la transformación.

Pero, ¿qué significa migrar cuando entendemos nuestro cuerpo como casa, territorio, mundo o incluso universo? ¿Cómo se experimenta ese viaje interior?

Desde esta perspectiva, el elenco de investigación y creación UNAE/ENSAD plantea una pregunta profunda y necesaria, que no surge al azar. Lejos de limitarse a una mirada antropológica o teatral, este cuestionamiento se inserta en un contexto global, convulso y complejo, que trasciende lo local.

Vivimos un tiempo en el que políticas ultraconservadoras, religiones ancladas en dogmas rígidos y sistemas capitalistas actúan en alianza para librar una batalla por el control de nuestros cuerpos, ideas y pensamientos. Poderes que pretenden imponer límites a nuestros deseos y aspiraciones humanas, que se atreven incluso a dictar a quién debemos amar.

Este evento escénico no busca ser ni política ni artísticamente “correcto”. Su esencia reside en travestir el teatro como medio de expresión, desplegando múltiples capas visuales, sensoriales y sonoras que se entrelazan, se tensionan y se disuelven en una experiencia disruptiva e inquietante. Cuerpos Migrantes; una declaración, una pregunta, un llamado al viaje desde lo más profundo de nuestra existencia.